RAQUEL ÁLVAREZ La artista japonesa ante una de sus obras
Jueves, 28-05-09 (ABC)
M.C.
SEVILLA. Quiso estudiar teatro en su Tokyo natal, pero uno de sus profesores le dijo que para mejorar su inglés, debería viajar a Estados Unidos. Fumiko Amano no se lo pensó dos veces, cogió el petate y se marchó a la tierra de Obama.
Fumiko Amano presenta estos días en Sevilla la que significa su primera exposición en España, una muestra titulada «Everything is alive» y que estará abierta al público hasta el próximo treinta de mayo en la Murnau Art Gallery, sita junto a la pila del Pato.
El sistema americano le exige estar muy al día de lo que ocurre en el mundo artístico, tal es así, que incluso ella misma ha creado una empresa para ayudar a otros artistas. «En América para poder vender un cuadro tienes que moverte mucho, hacer muchísimas relaciones públicas, conocer a gente, ir a fiestas, acudir a los estrenos de las galerías... El marketing en el arte es muy importante en Estados Unidos, sin él no se vende un cuadro», afirma.
Además, se queja de que, al igual que ocurre en Europa, «el arte sigue estando en manos de los hombres. Eso ha cambiado poco. No he tenido problemas por ser japonesa, sino por ser mujer». Lo que sí alaba del sistema americano es que, por ejemplo en la ciudad de Los Ángeles, la Universidad de L.A. tiene un concierto con cinco galerías, «en donde exponen los estudiantes y futuros artistas, incluso algunos de ellos terminan trabajando en estas galerías si no sobresalen como creadores».
Lleva quince años viviendo de su pintura. Los cuadros que presenta en Sevilla se inspiran en el cine europeo, en nombres como Fellini o Godard, «porque sus películas siempre tienen escenas impactantes, imágenes que se quedan en la retina», afirma.
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